Para Janelle Denison,
por estar presente día tras día,
página tras página, línea tras línea,
palabra tras palabra.
Y luego volver a empegar de nuevo.
¡Este libro no habría sido posible sin ti!
Una vez más, gracias de nuevo a Lynda Sue Cooper por responder a todas mis preguntas, por insignificantes que fueran, y por escribir True Blue. ¡Eres un regalo caído del cielo! Los errores son míos y sólo míos.