Me gustaría expresar mi agradecimiento a las siguientes personas por su ayuda y apoyo en este proyecto. Sin ellas, nunca podría haber hecho realidad mi sueño. A mi editora, Christine Zika, por su paciencia y su interminable capacidad de aportar ideas inspiradoras.
A mi agente literaria, Damaris Rowland, por su fe y su sabiduría.
A mis compañeras y críticas, Karen Hawkins, Rachelle Wadsworth y Haywood Smith, por sus ideas brillantes y sus bolígrafos rojos.
A mi hermana, Kathy Guse, por decirme: «Tú puedes» cada vez que necesitaba oírlo.
A mis suegros, Art y Lea D'Alessandro, por sus consejos y el impagable regalo de su hijo.
También me gustaría darles las gracias a los miembros de Georgia Romance Writers, por su apoyo, muy especialmente a Martha Kirkland, Stephanie Bond Hauck, Sandra Chastain, Pat Van Wie, Donna Fejes, Carmen Green, Deb Smith, Anne Bushyhead, Ann Howard White, Rita Herrón, Susan Goggins, Jenni Grizzle, Gin Ellis, Carina Rock y Wendy Etherington.
Y gracias también a Christine McGinty, Sheryl Brothers, Michelle y Steve Grossman, Marsha Brown, Jane Sánchez, Caroline Sincerbeaux y Jeannie Pierannunzi.